atardecer y si fueran de mentira tus adioses, tu ausencia
si el tiempo fuera una pantomima un remolino de dunas que de pronto vuelve a unirnos en su cálida arena
si las pupilas de los tulipanes en flor abrazaran con sus pétalos la sonrisa, el atardecer que un día se extravió por los acantilados que hoy nos devuelven a la vida
F. Bellido/Abril-2011 |