Si en tarde de lluvia O noche helada Te quedan lejos la orilla del mar, el río Y la botella donde escondimos pensamientos y sueños compartidos… Te falta hasta la tinta, la pluma de fénix o el pergamino: Piensa en mí, Cierra los ojos y escribe.
Llena el universo de páginas, Deja gotear La tristeza, saltar la alegría. (Es importante visualizar una ventana abierta Y muchas estrellas, ver las palabras transformarse en libélulas, en anémonas, barcos de papel, flores de loto, espejos bifurcados…)
Adivínate doble Y las palabras encontrarán el camino. Irán a posarse en mi almohada, Lentamente, esperando a ser leídas. Ellas serán río, cauce, mar y ola, Redoma con mensaje, sello y travesía.
*De Marié Rojas Tamayo. La Habana. Cuba
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